
¿Qué es el Grupo de los 20?
El G-20 es un grupo de países formado en el año 1999 por los ocho países más industrializados del mundo (G-8), los once países con las principales economías emergentes de todas las regiones del mundo y la Unión Europea como bloque económico. Se trata de un foro de cooperación y consultas entre los países en temas relacionados con el sistema financiero internacional y tiene como propósito estudiar, revisar y promover discusiones sobre temas que atañen a los países industrializados y las economías emergentes con el objeto de mantener la estabilidad financiera internacional y encargarse de materias que estén más allá del ámbito de acción de otras organizaciones de menor jerarquía (2).
Las medidas del Plan Anticrisis Mundial
En la referida cumbre, los líderes del G-20, partiendo de la premisa de que “una crisis global requiere una solución global”, definieron un Plan Anticrisis de seis puntos claves:
El G-20 es un grupo de países formado en el año 1999 por los ocho países más industrializados del mundo (G-8), los once países con las principales economías emergentes de todas las regiones del mundo y la Unión Europea como bloque económico. Se trata de un foro de cooperación y consultas entre los países en temas relacionados con el sistema financiero internacional y tiene como propósito estudiar, revisar y promover discusiones sobre temas que atañen a los países industrializados y las economías emergentes con el objeto de mantener la estabilidad financiera internacional y encargarse de materias que estén más allá del ámbito de acción de otras organizaciones de menor jerarquía (2).
Las medidas del Plan Anticrisis Mundial
En la referida cumbre, los líderes del G-20, partiendo de la premisa de que “una crisis global requiere una solución global”, definieron un Plan Anticrisis de seis puntos claves:
- Fijar "nuevas reglas" para los salarios y bonificaciones a nivel mundial;
- Inyectar 1.1 billones de dólares a la economía mundial;
- Principios comunes en todo el mundo para tratar los activos tóxicos de los bancos;
- Publicar una "lista negra" de los paraísos fiscales;
- Medidas para fortalecer el comercio; y
- Regulación financiera con nuevas condiciones para las agencias de crédito o los llamados hedge funds.
Además de lo anterior, los gobernantes acordaron que la elección de los directivos de los organismos financieros internacionales se haga mediante un proceso abierto, transparente y basado en méritos, según la declaración emitida al término del encuentro.
El principal artífice de las medidas económicas adoptadas fue, según informes de la prensa internacional, el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, quien, además, concentró la mayor atención de los asistentes y fue visto como uno de los ganadores del encuentro y declaró que se dio un “giro decisivo” para la economía mundial que conducirá las finanzas hacia “el camino de la recuperación”.
El cónclave fue catalogado por el mandatario norteamericano como “histórico”, ante los medios de comunicación internacionales.
Sin embargo, a pesar del anuncio del Plan del G-20, la incertidumbre mundial sobre el final de la crisis, continúa y empiezan a surgir voces de alerta sobre el advenimiento de una nueva crisis de deuda externa en los países menos desarrollados del mundo.
Recomendaciones de Toussaint para América Latina frente a la crisis mundial
Por su parte, Eric Toussaint, presidente del Comité para la Anulación de la Deuda del Tercer Mundo con sede en Bruselas, analizó en Medellín la actual crisis mundial y aseveró que los gobiernos progresistas de América Latina “deberían retirarse del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y promover una nueva arquitectura regional, potenciando entre otras, iniciativas como la del Banco del Sur y un Centro Internacional de Arreglo de Diferencias del Sur (CIADI) como alternativa al del Banco Mundial”, planteó (3).
El historiador y politólogo belga vinculado con la investigación socioeconómica de América Latina, sostiene que las organizaciones multilaterales como el BID han perdido su legitimidad tras la crisis económica global que han generado.
Considera por ello prioritario y trascendente para los países latinoamericanos, si quieren lograr quitarse los amarres de Washington y salirse al mismo tiempo de los esquemas de especulación y de beneficio al gran capital que imponen organismos multilaterales como el BID, no desmayar en la concreción del Banco del Sur; “crear una moneda, una universidad, una industria farmacéutica comunes, así como fortalecer medios de comunicación como el canal de televisión Telesur y generar al mismo tiempo, una política para el campo en todo el hemisferio para favorecer la soberanía alimentaria y la reforma agraria”.
Sin duda, se trata de una propuesta alternativa y latinoamericanista frente a la crisis financiera y económica global y las secuelas socioeconómicas de pobreza y polarización en la distribución del ingreso entre los países de mundo y al interior de los mismos, como consecuencia de las políticas del consenso de Washington, hoy cuestionadas desde todas las vertientes económicas.
----------
(1) http://www.abc.es/20090402/internacional-internacional/duplica-ayuda-quiere-acabar-200904021410.html
(2) http://es.wikipedia.org/wiki/G-20
(3) http://www.atrio.org/?p=1692
El principal artífice de las medidas económicas adoptadas fue, según informes de la prensa internacional, el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, quien, además, concentró la mayor atención de los asistentes y fue visto como uno de los ganadores del encuentro y declaró que se dio un “giro decisivo” para la economía mundial que conducirá las finanzas hacia “el camino de la recuperación”.
El cónclave fue catalogado por el mandatario norteamericano como “histórico”, ante los medios de comunicación internacionales.
Sin embargo, a pesar del anuncio del Plan del G-20, la incertidumbre mundial sobre el final de la crisis, continúa y empiezan a surgir voces de alerta sobre el advenimiento de una nueva crisis de deuda externa en los países menos desarrollados del mundo.
Recomendaciones de Toussaint para América Latina frente a la crisis mundial
Por su parte, Eric Toussaint, presidente del Comité para la Anulación de la Deuda del Tercer Mundo con sede en Bruselas, analizó en Medellín la actual crisis mundial y aseveró que los gobiernos progresistas de América Latina “deberían retirarse del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y promover una nueva arquitectura regional, potenciando entre otras, iniciativas como la del Banco del Sur y un Centro Internacional de Arreglo de Diferencias del Sur (CIADI) como alternativa al del Banco Mundial”, planteó (3).
El historiador y politólogo belga vinculado con la investigación socioeconómica de América Latina, sostiene que las organizaciones multilaterales como el BID han perdido su legitimidad tras la crisis económica global que han generado.
Considera por ello prioritario y trascendente para los países latinoamericanos, si quieren lograr quitarse los amarres de Washington y salirse al mismo tiempo de los esquemas de especulación y de beneficio al gran capital que imponen organismos multilaterales como el BID, no desmayar en la concreción del Banco del Sur; “crear una moneda, una universidad, una industria farmacéutica comunes, así como fortalecer medios de comunicación como el canal de televisión Telesur y generar al mismo tiempo, una política para el campo en todo el hemisferio para favorecer la soberanía alimentaria y la reforma agraria”.
Sin duda, se trata de una propuesta alternativa y latinoamericanista frente a la crisis financiera y económica global y las secuelas socioeconómicas de pobreza y polarización en la distribución del ingreso entre los países de mundo y al interior de los mismos, como consecuencia de las políticas del consenso de Washington, hoy cuestionadas desde todas las vertientes económicas.
----------
(1) http://www.abc.es/20090402/internacional-internacional/duplica-ayuda-quiere-acabar-200904021410.html
(2) http://es.wikipedia.org/wiki/G-20
(3) http://www.atrio.org/?p=1692